Las razón de que las redes sociales son tan adictivas va muy relacionada a los placeres que evoca en nosotros el reconocimiento de las personas.
Así es, cada vez que nosotros publicamos un post, editamos una foto y la subimos mostrando nuestro mejor ángulo, estamos preparando una pequeña carga de dopamina o como muchos la conocen “La molécula de la recompensa” la intención es que al ser validados por los demás nos sintamos valorados, que somos importantes para los demás, es por eso que muchas personas sufren depresión al publicar una foto que recibió poca aceptación en comentarios o en likes.
El porqué muchas personas crean sus canales de youtube para volverse youtubers y al ser duramente criticados, deciden abdicar dado que no recibieron la recompensa que deseaban y del otro lado también, hay personas que su dopamina es criticar a los demás y sentirse bien al saber que su opinión, buena o mala tiene influencia en los demás.
Es un proceso químico.
Las redes sociales causan que nuestro cerebro segregue dopamina, una molécula asociada a sensaciones tan especiales como el recibir un beso de tu pareja, por ello que las redes sociales sean tan adictivas, nos dan poder de afectar a los demás y de ser afectados por ellos, nos permiten generar comunidad.
La pregunta es ahora que conoces esta información ¿Cómo usarla a favor de tu marca para bien?
Pasemos a la acción.
Debes de planear muy bien las reacciones que deseas que tu marca provoque en redes sociales, porque dejame decirte que de estas sensaciones depende la aceptación o rechazo que van a tener tus publicaciones, todo influye, voz, tono, color, intención, cadencia y lenguaje.
Por último te dejamos esta tarea, diseña la personalidad de tu marca y toma en cuenta todos los detalles posibles, hazla lo más completa que puedas y comienza a esparcir su esencia en redes sociales.